Dos hombres, César y Carlos, pelean una noche en el puerto. Suenan dos disparos y uno de ellos cae al agua. Carlos cree que lo ha matado, y para huir, se alista en la Legión, donde reencuentra a César, al que creía muerto. Durante los tres siguientes años se pasan el tiempo odiándose el uno al otro. Las argucias de César consiguen confinar a Carlos a un pelotón de castigo, cuyo sargento es asesinado una noche, sin encontrar un culpable.