El señor Vila es un hombre honrado que trabaja como contable en la Central Harinera. Tiene cuatro hijos y está casado con la señora Adela, buena esposa y excelente madre. La familia vive apaciblemente en perfecta armonía hasta que, un buen día, todo se viene abajo cuando Elvira discute con sus padres y se escapa de casa con Jorge, un joven noble que desgraciadamente muere en un accidente. Además, el señor Vila pierde el empleo a causa de su honradez.